Insoportablemente detestable, no te me cruces porque te vas a arrepentir. No es una amenaza sino una advertencia para los próximos días.
Las peores caras, las peores contestaciones y acciones y por sobre todas las cosas las peores mañas. Todo eso y mucho más en una sola persona.
El mal humor se apodera de mí y se concentra todito en unos cuantos días en los llego a mirarme al espejo y odiarme.
Nada tiene que ver con los ciclos de la mujer, ni la falta de sexo, ni con la adolescencia que hace tiempo deje atrás. Supongo que es algo genético, o tal vez la sumatoria de situaciones incomodas, de la rutina que me rodea, de la ubicación de los astros, no se, no encuentro otra explicación.
Irritable sobremanera, no soporto estar en un lugar cerrado por mas de 60 minutos, no puedo concentrarme, no logro expresar ni una idea y lo pero de todo no puedo parar de hacer muecas y mufar o gruñir por todo.
Uno a penas se soporta a si mismo y para colmo tiene que salir a la calle en esos días y enfrentar al otro, con su mejor cara o la que mejorcito le salga. Caretearla, ocultarlo o invisibilizar de alguna manera ese humor abominable.
No siempre sucede pero cuando pasa, mejor desaparecerse por un tiempo, en realidad lo que dure ese estado para no perjudicar al otro y para ahorrase unas cuantas disculpas y malos entendidos.
La peor parte se la llevan los que conviven con uno, los que se preocupan por la situación y todo cuanto ser merodee cerca de uno.
Alguien se va a cansar, alguien no lo va a soportar más, sea lo que fuere ya me tiene cansada...